Rossomano, Daniel Enrique
- Militancia: Juventud Trabajadora Peronista
- Lugar de trabajo: Caja de Ahorro
- Fecha de secuestro: 10/01/1978
- Lugar de secuestro: Su domicilio de la calle Espora no 3877
- Situación actual: Persona fugado
Breve relato de los hechos
Cerca de las 23:00 hs., tocaron el timbre de su casa diciendo ser “la policía”. Su madre abrió la puerta y él se acercó a ver qué sucedía. Un hombre dijo que necesitaba hacerle unas preguntas por lo que lo llevaría por 3 días y luego sería dejado en libertad. Una vez en la mansión le aplicaron tormentos de distinta índole. Recordó que una vez escuchó la voz de “El Correntino” y “El Tucumano” y golpeó la puerta a los gritos porque tenía algo para decirles. Les comentó que al responsable del grupo de adherentes lo había visto en un auto azul. Que lo mismo le tuvo que repetir a “Seisdedos” y desde ese momento no fue más “apretado psicológicamente” ni torturado. Lo llevaron entonces a otra habitación con Fernández, García y Tamburrini, con quienes las guardias tenían un “trato especial”. Nunca más fue interrogado ni golpeado, salvo una oportunidad que “El Tucumano” le echó insecticida en la cabeza y 4 años más tarde tuvieron que extirparle de allí un tumor.
Fernández comenzó a decir que debían fugarse, por lo que empezaron a idear un plan. Primero pensaron en tomar la guardia pero dado que era difícil ejercer violencia sobre éstos, les contó su anécdota con el “clavito”, y que con éste había podido abrir una ventana.
El 24 de marzo de 1978 abrieron la ventana, ataron las colchas y descendieron de la casa. Que el nombrado quería robar un auto para salir rápido del lugar utilizando su conocimiento para hacer un puente con un cable. Agregó que sufría de vértigo y Fernández le preguntó si se animaba a salir primero. Dijo que sí pero dado que las frazadas no llegaban hasta el piso, no quería soltarse. Que desde arriba Fernández lo alentaba y saltó.
Se fue hasta la casa de una tía que vivía en “La Paternal” pero ésta no estaba, por lo que tomó la línea de colectivo n° 135 hasta la casa de su madrina. Quiso que su mamá, su papá y su hermano se vayan de su casa por temor a represalias por haberse escapado por lo que se alojaron cerca de un mes en la casa de su “tía negra”. Luego, se mudaron al barrio de Lugano, en la calle Pilar.
Pasado un mes lo encontró la “patota” . Lo tabicaron y lo llevaron hasta la Comisaría de Castelar, lo que supo por dichos de una persona detenida allí que tendría cerca de 22 años.
Lo dirigieron entonces hasta la Comisaría de Haedo, donde fue puesto a disposición del Poder Ejecutivo de la Nación 2 semanas más tarde. Le avisaron a su familia que estaba alojado en esa dependencia. Posteriormente fue traslado a la Unidad N° II de “Devoto” del Servicio Penitenciario Federal. Luego fue alojado en la Unidad N° 9 de “La Plata” del Servicio Penitenciario Bonaerense.
Tras intentar realizarle un “Consejo de Guerra”, fue llevado el día 30 de abril hasta la Superintendencia de la Coordinación Federal, donde fue colocado en un calabozo sólo. Pasadas 48 horas, recuperó su libertad el 2 del mes de mayo del año 1979.
Centros Clandestinos de Detención por los que pasó
Sentencias e imputados