Breve relato de los hechos

En los primeros días de abril de 1977, mientras Miguel Ángel Bruno se encontraba en su domicilio junto con su compañera Susana Marino, alrededor de las 2 de la madrugada, golpearon la puerta y al asomarse por la mirilla pudo ver a Héctor Oscar Seisdedos, imputado en la causa, junto con un grupo de personas. Ingresaron violentamente al domicilio, colocaron a su esposa en una habitación en el fondo de la finca, lo golpearon, le colocaron unos algodones en los ojos, le encintaron la cabeza y le pusieron una capucha encima. Miguel Ángel pudo oír los gritos y golpes de su mujer mientras era interrogada. Su casa fue destruida. Le preguntaban por las armas. Luego de una hora lo esposaron con las manos hacia atrás y los introdujeron en el piso trasero de un vehículo.