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Con el grado de prefecto en 1976 fue jefe de la División Operaciones de la Prefectura Bahía Blanca, con sede en Ingeniero White, que participó en secuestros ordenados por la Fuerza de Tareas 2 de la Armada. Las víctimas eran trasladadas al centro clandestino que funcionó en el buque ARA 9 de Julio, en la Base Naval de Puerto Belgrano, y en algunos casos al Batallón de Comunicaciones 181 del Ejército. Fue felicitado por sus superiores por “su capacidad operativa policial” durante la ola de secuestros de dirigentes y activistas gremiales a partir del 24 de marzo de 1976.