Se celebró otra audiencia en este juicio oral y público por crímenes de lesa humanidad en la que declararon cuatro testigos.
Campo de Mayo.
En una nueva audiencia del Juicio Unificado Campo de Mayo el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°1 de San Martín continuó con las declaraciones testimoniales. En esta oportunidad declararon Vanina Agostini, Alba Lanzillotto, Pablo Casariego Tato y Ramiro Menna Lanzillotto.
La audiencia comenzó con la declaración de Vanina Agostini, testigo general del equipo de investigación del Ministerio de Defensa quien aportó datos sobre dos embarcaciones de la Armada Argentina utilizadas durante la dictatura para alojar y torturar detenidos-desaparecidos. La testigo describió los recorridos y los lugares donde anclaban los buques ARA Murature y ARA King explicando al tribunal que las embarcaciones formaban parte de los operativos en el área naval fluvial, desde el Río de la Plata hasta la Cuenca del Plata, también los ríos navegables Uruguay (limítrofes e interior) y Parana.
La investigadora explicó que esos buques actuaban en el plan de capacidades de la armada de 1975 y que su acción prioritaria era la “lucha contra la subversión” en Zarate, Mar del Plata, Ensenada, Trelew y Bahía Blanca. El ARA Murature y el ARA KIng, según los registros de la armada, anclaban en el Apostadero Naval Buenos Aires y en Rosario, no se menciona fondeo en puerto en la zona de Zárate aunque distintos testigos declararon que fueron secuestrados y torturados en dichos buques y que se encontraban fondeados allí.
A continuación el tribunal tomó declaración a Alba Lanzillotto su hermana Ana María Lanzillotto, fue secuestrada embarazada de 8 meses y se encuentra desaparecida. El esposo de Ana María, Domingo Menna, tambíen integra la lista de los 30.000 desaparecidos y desaparecidas. La testigo dio cuenta de que su hermana fue vista en Campo de Mayo: ” Pude hablar con Patricia Herr, me contó que la había visto a Ani cuando iba al baño, que estaba embarazada, no podía hablar, nada más que la vio”.
En su declaración la testigo relató que Ramiro, el primer hijo de Ana María y Domingo, luego del secuestro, quedó en una guardería y que fue el hermano de la testigo quien pudo recuperarlo en una comisaría de San Martín. La identidad del niño que nació en cautiverio, que fue entregado a una familia, fue restituida en 2016 por Abuelas de Plaza de Mayo. Para finalizar su testimonio Alba expresó: “De Anita y el Gringo Menna no tenemos ninguna noticia de cuál fue su destino, sabemos que están muertos, pero no dónde están”.
Luego fue el turno de Pablo Casariego Tato, hijo de Jorge Casariego y Norma Tato. El testigo nació en la maternidad clandestina de Campo de Mayo en 1977, fue apropiado por un médico de carrera militar y una docente, con respecto a las circunstancias del secuestro Pablo relató: “Ese día estaba mi mamá, mi papá, mis dos hermanos, los hijos de mi mamá, yo estaba en la panza de mi mamá, también fui secuestrado ese día, ella estaba embarazada de 5 meses”.
A continuación el testigo explicó “Nací en Campo de Mayo, mi partida de nacimiento rectificada y la anterior también dice lugar de nacimiento Campo de Mayo. Desde que nací hasta el 86, que nos fuimos a Asunción, siempre viví muy cerca de Campo de mayo, era como el campo de deportes de mi infancia”. En 1986, siendo un niño de 8 años, sus apropiadores decidieron escaparse a Parayuay ya que Abuelas de Plaza de Mayo había presentado una denuncia: “Me dijeron, nos tenemos que ir de vacaciones ahora…esas vacaciones duraron 20 años”, explicó Pablo Casariego Tato.
En el año 87 la Interpol había ubicado a Pablo y a sus apropiadores, la justicia pidió la extradición y los detuvieron a todos: “Yo tenía 9 años y fui a una comisaría, 24 horas en una celda”, con esa detención es que el testigo se enteró de la verdad sobre su historia: “Ahí se abre un interrogante, hijo de quién soy” explicó.
Ya en 2003 Pablo se vino a Argentina a estudiar: “Yo estaba peleado con las instituciones de Derechos Humanos, tenía la cabeza seteada de otra manera. Pasó como un año, año y pico donde digo bueno, vamos a resolverlo”. En 2006, luego de realizarse estudios de ADN en el Hospital Durand, recuperó su identidad: “Ahí oficialmente ya sabía que era Pablo Casariego Tato”. Su testimonio finalizó de la siguiente manera: “Yo le pido a las personas que están procesadas en esta causa que hay que decir la verdad, no hay que esconder nada. A la justicia hay que llevarla con dignidad. Hay que ser digno de la sentencia, no escaparle a la culpa”.
Finalmente declaró Ramiro Menna Lanzillotto hermano por parte de madre de Pablo Casariego Tato, hijo de Ana María y Domingo Menna, ambos militantes de Partido Revolucionario de los Trabajadores: “Ellos tenían una mlitancia que implicaba básicamente el deseo profundo, el sueño profundo, de una trasnformación para lo que se entendía en su momento y hasta el día de hoy como Patria Grande, un sueño empancipador”, explicó el testigo.
A continuación dió cuenta de que en su infancia, antes del secuestro, su familia tenía una vida nómada: “No tengo registro de los lugares donde vivimos pero se por distintas fuentes que estuvimos en distintos lugares básicamente por esta situación de persecución. Sobre todo a partir del 24 de marzo de 1976”. Finalmente el testigo fue recuperado por su familia en una comisaría de San Martín.
Las audiencias de este juicio se realizan todos los días miércoles ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°1 de San Martín en donde son juzgados 22 imputados por cometer crímenes de lesa humanidad contra 323 víctimas. La Subsecretaría de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires es querellante en este juicio.