En esta oportunidad el Tribunal Criminal Federal N° 2 de San Martín tomó declaración testimonial a tres testigos que realizaron el sevicio militar en Campo de Mayo.
Lesa Humanidad
En el marco del debate oral y público que investiga los crímenes perpetrados en el Aeródromo del Batallón de Aviación 601 de Campo de Mayo, el Tribunal Oral Federal N°2 de San Martín tomó declaración testimonial a Manuel Adolfo Pérez, Lorenzo Cayetano Vicentini y Horacio Rodolfo Pérez.
En primer lugar declaró Manuel Adolfo Pérez, quien realizó el servicio militar obligatorio entre 1975 y 1976 en Campo de Mayo y explicó al tribunal que fue asignado a la compañía de comando y que por lo general se encargaba de las guardias. En su declaración el testigo dio cuenta de que en una oportunidad vio entrar una camioneta que transportaba personas atrás: “no se cuántas ni qué tipo de personas eran, no se si eran 2 o 10, pero si que adentro había alguien”.
En su declaración Pérez expuso que, luego de ingresar al predio, las camionetas se dirigían a un laboratorio abandonado y que luego salían vacías: “después de que entraba la camioneta se producía un despegue, salía el avión, el Twin Otter, y a la vuelta estaba el camión de bombero que lavaban el avión” y agrego: “nos poníamos a hablar entre nosotros, calculábamos que los hacían boleta ahí y los tiraban”, concluyó el testigo.
A continuación fue el turno de Lorenzo Cayetano Vicentini, el testigo realizó el servicio militar en 1976 luego de haber pedido una prórroga para terminar sus estudios de medicina. El testigo identificó a distintos imputados e hizo una descripción de ellos en función del trato que tenían con los conscriptos: “Conditi venía a dar educación física, Arce era bonachón, Malacalza era muy malo, Devoto oscilaba entre la simpatía y el autoritarismo y Geroso se daba poco con los soldados”, para finalizar Vicentino declaró haber visto también a Lance y a Riveros en Campo de Mayo.
Finalmente el tribunal tomó declaracion testimonial a Horacio Rodolfo Pérez quien realizó el servivicio militar entre 1977 y 1978 en el Batallón de Aviación 601 de Campo de Mayo y fue asignado a la Compañía de Aviación. El testigo dio cuenta de los constantes vuelos que se ralizaban y describió el tipo de aviones que se utilizaban: “Los helicópteros eran Bell 1H1H y los aviones Cesna, Bicram y había uno que se parecía a un hércules pero era más chico”, explicó.
Los hechos que se juzgan
El Aeródromo del Batallón de Aviación 601 de Campo de Mayo fue uno de los lugares en los que se gestó el último eslabón del circuito represivo desplegado por las fuerzas armadas y de seguridad entre 1976 y 1983.
De la mayoría de las declaraciones incorporadas al expediente surge que los detenidos eran ingresados al predio en vehículos no oficiales, conducidos por personas vestidas de civil que se dirigían directamente a la cabecera de la pista de aterrizaje donde los esperaban aviones estacionados. Los testigos relataron que esos vehículos trasladaban bolsas con cadáveres y jóvenes ensangrentados con indicios de haber sido sometidos a largos cautiverios.
El debate oral por estos crímenes comenzó el 5 de octubre pasado ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°2 de San Martín y puede presenciarse a través de la cuenta de Twitter del tribunal (@TribOralFed2SM).
