En esta oportunidad declararon los sobrevivientes Fabio y Filemón Acuña.
Lesa Humanidad
En el marco del juicio oral y público que investiga los delitos perpetrados en los ex Centros Clandestinos de Detención Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes y El Infierno de Avellaneda, el Tribunal Oral Federal Nº1 de La Plata tomó declaración a dos testigos.
En primer lugar el tribunal tomó declaración a Fabio Acuña, el entonces cabo segundo de Prefectura Naval Argentina fue secuestrado en 1975, en la antesala del golpe cívico miltar, por un grupo de tareas junto a su hermano Filemón en la localidad bonaerense de Alpargatas: “Fuimos a parar a un lugar de torturas, se escuchaban gritos, no se cuántos días estuve ahí”, relató.
El testigo explicó que luego fueron trasladados al Centro Clandestino de Detención Pozo de Quilmes en donde estuvieron secuestrados durante un mes y medio, luego a la Comisaría octava de La Plata y finalmente a Campo de Mayo donde compartieron cautiverio con un grupo de detenidos. Respecto a su paso por el CCD Pozo de Quilmes el testigo explicó: “No había nada, comíamos restos, los huesos. Pasábamos tres días sin comer. En el peor momento estaba semi muerto en la celda, del hambre que tenía”.
El sobreviviente dio cuenta de que fue puesto a dispocición del Poder Ejecutivo Nacional (PEN) y trasladado, previo paso por la Cárcel de Devoto a la Unidad Carcelaria N° 7 de Chacho: ” Ahí estuvimos 6 años. No era una cárcel, si no un campo de concentración. Estaba aislado totalmente, no teníamos comida ni agua, nos cortaron la visita, de 60 kilos que pesaba llegaba a los 40″.Fabio Acuña recuperó su libertad luego de pasar 7 años encarcelado.
A continuación fue el turno de Filemón Acuña, quien sufrió el mismo derrotero por distintos CCD que su hermano Fabio. El testigo dió cuenta también de las condiciones de detención y las torturas a las que lo sometieron: “Me amarraban a una cama y comenzaban los interrogatorios, con picana eléctrica. Me preguntaban por la actividad subversiva que yo supuestamente tenía”.
El sobreviviente finalizó su testimonio explicando cómo continuó su vida luego de ser secuestrado, torturado y encarcelado durante 7 años: “Mi vida fue mala, malísima, no tenía trabajo, vivía con lo justo. Hice de todo, vendedor ambulante, lo que podía hacer, lo que me dejaban, todos los días tenía que ir a la comisaría a firmar un parte diario. Fue un momento difícil, tuve que arreglarme como pude”.
Los hechos que se juzgan
El juicio por los pozos de Banfield y Quilmes unifica una serie de causas, la primera de ellas elevada a juicio hace ocho años. Se trata de dos de los centros clandestinos de detención más grandes que funcionaron en la Provincia de Buenos Aires durante la última dictadura cívico-militar.
En el caso de El Infierno se investigará la responsabilidad de cuatro policías de la Provincia de Buenos Aires y un civil por los delitos de privación ilegal de la libertad y aplicación de tormentos, hechos incluidos dentro de la categoría de crímenes de lesa humanidad, cometidos en el ex CCDyT “El Infierno” ubicado en Avellaneda.
El Tribunal Oral Federal N 1 de La Plata está conformado por Walter Venditti, Esteban Rodríguez Eggers y Ricardo Basílico, mientras que por el Ministerio Público Fiscal intervienen Hernán Shapiro, Gonzalo Miranda y Juan Martín Nogueira.
A través de la Dirección de Querellas por Crímenes de Lesa Humanidad y Leyes Reparatorias de la Subsecretaría de Derechos Humanos, la Provincia es querellante en este debate en el que se investigará la responsabilidad de los imputados por los delitos de privación ilegal de la libertad, aplicación de tormentos, homicidio calificado, abuso sexual con acceso carnal y sustracción, retención y ocultamiento de menores. La Dirección de Grupos en Situción de Vulnerabilidad acompana a las víctimas y familiares en este juicio.
Seguí las audiencias de este juicio por crímenes de lesa humanidad los días martes a las 10:00 horas en: http://www.laretaguardia.com.ar/