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“EXPRESO MI AGRADECIMIENTO A ESTE TRIBUNAL Y A LA AUDIENCIA POR DARME LA POSIBILIDAD DE EXPONER MI TESTIMONIO”

Continúan las declaraciones de sobrevivientes y testigos ante el  Tribunal Oral Federal Nº 1 de La Plata.

Lesa Humanidad.

En el marco del juicio oral y público que investiga los delitos perpetrados en los ex Centros Clandestinos de Detención Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes y El Infierno de Avellaneda declararon Leonardo Blanco, Liliana Canga y Marcos Alegría.


En primer lugar declaró Leonardo Blanco, el trestigo fue detenido el 7 de noviembre de 1975 por fuerzas conjuntas y trasladado a la comisaría 2da. de Lanús: “Estuvimos unas horas, luego nos vendaron, nos subieron a unos vehículos y nos trasladaron al Pozo de Banfield”. Blanco describió el lugar explicando al tribunal que había persianas,  mucha gente en el piso y que se escuchaban gritos de las personas que se encontraban secuestradas.


El sobreviviente explicó que luego  de estar secuetrado por un período de un mes fue trasladado al Pozo de Quilmes: “Ahí estábamos en celdas individuales, con tela adhesiva en los ojos, corbata en las manos y se escuchaban también torturas”. Luego de aproximadamente un mes le tomaron fotos y  le hicernon firmar papeles, le dijeron que iba a pasar seis años encarcelado, lo traladaron a la cárcel de Devoto y luego al penal de Resistencia en Chaco: “Justo el 7 de noviembre del 81 salí, o sea que se cumplieron exactamente 6 años” concluyó el testigo.


A continuación el tribunal tomó declaración a Liliana Canga, hermana del detenido desaparecido Ernesto Enrrique Canga. La testigo dio cuenta de las circunstancias del secuestro de su hermano: “Vinieron a mi casa donde habitábamos con mi hermano y mi madre, destrozaron la puerta, entraron a los gritos  y nos taparon la cabeza con una frazada,  lo buscaban a él”. Luego explicó que a su hermano lo golpearon, lo colocaron contra una pared, lo vendaron y se lo llevaron: “Fue todo lo que vimos, no supimos nada más de él”.


Liliana Canga explicó a tribunal que en 1986 leyó el libro de La Noche de los Lápices y se enteró de que su hermano había estado en el Pozo de Banfield. En 2011 el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) reconoció los restos de su hermano que se encontraban en el cementerio de La Plata como NN. “Para mí el haber recuperado sus restos fue muchísimo,  pienso en las miles familias que no han podido lograrlo y es una deuda muy grande, por eso el trabajo que hace el EAAF es maravilloso”, concluyó la testigo.


Finalmete declaró Marcos Alegría: “Antes de comenzar, expreso mi agradecimiento a este tribunal y a la audiencia por darme la posibilidad de exponer mi testimonio” explicó el testigo, que comenzó su relato dando cuenta de las circuntancias en las que dejó Chile luego del golpe de Estado a Salvador Allende. Alegría fue contratado por la empresa SAIAR y explicó al tribunal que el 13 de ablil de  1976  la industria fue copada por una unidad del ejército fuertemente armada con muchos vehículos ligeros, camiones, que rodearon toda la periferia de la industria y comenzaron con un allanamiento al interior de la industria. El testigo explicó al tribunal: “Después nos reunieron a todos y dos o tres oficiales más el jefe de personal se colocaron al  frente de los asalariados con una lista en su mano la cual tenía nombres y empezó a nombrar uno a uno para que saliéramos adelante, entre ellos estaba yo, nos subieron a un camión y nos trasladaron a la comisaría primera de Quilmes”.


En su testmonio Alegría explicó que pasó por varios lugares de represión y secuestro para finalmente ser trasladado al Pozo de Banfield, que luego fue puesto a disposición del Poder Ejecutivo Nacional y trasladado a la Unidad Nro. 9 de La Plata para finalmente ser expulsado a Francia el 16 de febrero de 1977.

Los hechos que se juzgan
El juicio por los pozos de Banfield y Quilmes unifica una serie de causas, la primera de ellas  elevada a juicio hace ocho años. Se trata de dos de los centros clandestinos de detención más grandes que funcionaron en la Provincia de Buenos Aires durante la última dictadura cívico-militar. 


En el caso de El Infierno se investigará la responsabilidad de cuatro policías de la Provincia de Buenos Aires y un civil por los delitos de privación ilegal de la libertad y aplicación de tormentos, hechos incluidos dentro de la categoría de crímenes de lesa humanidad, cometidos en el ex CCDyT “El Infierno” ubicado en Avellaneda.


El Tribunal Oral Federal N 1 de La Plata está conformado por Walter Venditti, Esteban Rodríguez Eggers y Ricardo Basílico, mientras que por el Ministerio Público Fiscal intervienen Hernán Shapiro, Gonzalo Miranda y Juan Martín Nogueira. 


A través de la Dirección de Querellas por Crímenes de Lesa Humanidad y Leyes Reparatorias de la Subsecretaría de Derechos Humanos, la Provincia es querellante en este debate en el que se investigará la responsabilidad de los imputados por los delitos de privación ilegal de la libertad, aplicación de tormentos, homicidio calificado, abuso sexual con acceso carnal y sustracción, retención y ocultamiento de menores.  La Dirección de Grupos en Situación de Vulnerabilidad acompaña a las víctimas y familiares en este juicio.